Coliseo

30 de diciembre de 2011
Símbolo de la eternidad de Roma, el Coliseo o Anfiteatro Flavio, como era conocido en época clásica, te transportará como pocos monumentos al esplendor de la Roma Imperial. Su arquitectura casi perfecta le ha permitido subsistir 2.000 años a pesar de los incendios, terremotos y los sistemáticos saqueos que ha sufrido a lo largo de la historia.
El mayor anfiteatro del mundo se levantaba en el corazón de la Antigua Roma. El emperador Vespasiano lo hizo construir en el lugar que ocupaba un gran estanque de la mansión de Nerón, para borrar de este modo la memoria de su odiado predecesor.







El nombre original “Anfiteatro Flavio” fue sustituido por el de Coliseo debido a la gran estatua de Nerón que se encontraba situada en la entrada de la Domus Aurea, "El Coloso de Nerón". La Domus Aurea fue un gran palacio construido bajo las órdenes de Nerón tras el incendio de Roma.














El Arco de Constantino fue erigido en el año 315 en conmemoración de la victoria de Constantino I el Grande en la batalla del Puente Milvio. Se encuentra situado entre el Coliseo y la Colina Palatino.